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domingo, 20 de mayo de 2012

PROBLEMAS DEBIDOS A LÍNEAS DE DESAGÜE INADECUADAS EN AIRES ACONDICIONADOS II



Aislamiento térmico insuficiente en la línea de desagüe

 
 
 
 
 
 
 










PROBLEMA

  • Un aislamiento pobre del tubo de desagüe, provoca condensaciones de humedad ambiental en su superficie exterior y eventuales goteos de agua.

SOLUCIÓN

  • Aislar el tubo de desagüe térmicamente con 10 mm de aislante.

miércoles, 16 de mayo de 2012

PROBLEMAS DEBIDOS A LÍNEAS DE DESAGÜE INADECUADAS EN AIRES ACONDICIONADOS

Cuando el desnivel de la línea es incorrecto

 
                                                                          












PROBLEMA

  • El agua no fluye adecuadamente por la línea de desagüe y rebosa la bandeja.

SOLUCIÓN

  • Asegúrese de que la línea de desague se instala con una pendiente mínima de un 20% (media gota en nivel) y de que el agua fluye hacia el exterior correctamente.

sábado, 12 de mayo de 2012

LA TÉCNICA DE VACIO EN LOS EQUIPOS DE AIRES ACONDICIONADOS

La instalación o reparación del equipo de aire acondicionado requiere aplicar “Buenas Prácticas” para realizar la deshidratación parcial o total del ciclo de refrigeración. No siempre la tarea de vacío se realiza correctamente y lamentablemente se corren riesgos de reducir o terminar con la vida útil del equipo en cuestión. En estos tiempos dónde la tecnología avanza rápidamente en la fabricación de nuevos equipos, con mejores características de aplicación y eficiencia, no se puede ocultar que la técnica a aplicar en la reparación exige ser cuidadoso y responsable en el manejo.

Sin ir muy lejos, algunos circuitos de refrigeración son más extensos, requieren aplicar soldaduras de sus tuberias de cobre y también utilizar aceites anticongelables sintéticos, los cuales son cien veces más ávidos de absorber humedad que los aceites minerales.

Los gases refrigerantes ecológicos que reemplazan inexorablemente a los refrigerantes que afectan a la capa de ozono también exigen un tratamiento especial, cómo ocurre con los llamados mezclas y otros cómo el R 410a, dónde nos debemos manejar con presiones de casi 70% superior a lo que estamos acostumbrados con el R22.

Un equipo es fabricado cuidando siempre que el sistema esté libre de contaminantes y gases no condensables. La limpieza de las cañerías y demás componentes del circuito es una regla de estricto cumplimiento.

Cuando el circuito de refrigeración no requiere ser preparado y armado por el instalador cómo sucede con los equipos compactos, roof top y máquinas enfriadoras de líquidos etc, no existen riesgos, pero si el equipo es una unidad separada (Split) es el momento de aplicar técnicas y manejo responsable de las Buenas Prácticas para terminar con éxito el trabajo.

Factores que conspiran contra las “Buenas Prácticas”:
  1. La tarea de montaje no siempre puede desarrollarse en lugares adecuados, por ejemplo, una obra en ejecución, la cual presenta las siguientes características:
    • poca limpieza del entorno
    • condiciones exteriores desfavorables
    • exigencias de protección y cuidado con los otros gremios
    • exigencias de tiempo total en la ejecución generalmente cortos
    • interrupciones no deseadas en el desarrollo del trabajo, etc.
  2. Los tiempos que se exigen o comprometen en una venta no siempre están relacionados con el tiempo real de ejecución.
  3. La demanda de trabajo que se incrementa en gran medida antes y durante la temporada.
  4. Disponibilidad de herramientas y materiales adecuados, como también personal Técnico capacitado, que en general debe estar dispuesto en una tarea estacional.
El Técnico debe sostener una conducta muy disciplinada, única forma de jerarquizar su profesión.
En muchos casos hemos escuchado y también leído que hacer la evacuación del sistema (tuberias de refrigerante líquido, gas y evaporador) podría simplificarse no usando la bomba de vacío, sino simplemente haciendo un barrido aún con el mismo gas, que en algunos casos, en exceso viene envasado dentro del equipo (política de algunas marcas en equipos partidos). Esta práctica de “ Barrido” es insuficiente, no es confiable y debe ser desechada, agregando a esto algo por demás reprochable, que es arrojar refrigerante al medio ambiente. No hay técnica que permita defender que esta tarea es segura, por el contrario el mecánico que la aplica comienza a transitar el camino de un probable fracaso en su trabajo.
En general el vacío y deshidratación de un sistema se realiza luego de haberse verificado que el circuito no tiene fugas, esto es después de haberse hecho una prueba con Nitrógeno y no encontrándose fugas. La evacuación se efectúa con el uso de una bomba de vacío que se conectará por medio de mangueras al circuito del equipo.
Una buena práctica en este trabajo está relacionada con tres elementos a saber:
  • La Bomba de Vacío.
  • Las mangueras y componentes que vinculan a la bomba con el equipo.
  • El equipo al cual se le hará vacío.

miércoles, 9 de mayo de 2012

NECESIDAD DE LA LIMPIEZA PERIODICA DE LAS INSTALACIONES DE AIRE ACONDICIONADO

El malestar físico, la irritación o la sequedad de los ojos, la nariz y la garganta, tos, nauseas y problemas respiratorios así como fatiga mental, alteraciones de memoria, somnolencia, apatía, mareos o el estrés son algunos de los problemas de salud producidos cuando las personas permanecen gran cantidad de tiempo en el interior de las oficinas en los edificios modernos, por efecto de factores de contaminación que pueden ser propios de los mismos locales, mala ventilación o deficiente funcionamiento de las instalaciones de aire acondicionado.

Esos factores pueden provenir de las propias de la actividad humana, como olores y fundamentalmente el humo de tabaco, que es causa de molestias, irritaciones y malestares, así como contaminantes que puede tener el mismo aire exterior destinado a la ventilación.

Por otra parte, se ha detectado que muchos de los nuevos materiales utilizados actualmente en la construcción así como el mobiliario y la decoración, producen emanaciones que lentamente van incorporándose al aire ambiente interior, tal el caso de barnices, tinturas, pinturas, pegamentos, etc. Además, las ropas, tapicerías, alfombras, cortinas y otros tejidos aportan al aire del interior del local diversas fibras y otros contaminantes.

El asbesto utilizado en elementos de la construcción como el fibrocemento, cielorrasos suspendidos, pisos vinílicos, etc., constituyen fibras minerales que con el desgaste se dispersan en el ambiente y que al penetrar en el aparato respiratorio, provoca lesiones que comprenden derrames, fibrosis pulmonar, cáncer de pulmón y pleura. Los formaldehídos presente en el papel, pinturas, productos de limpieza, cementos de contacto, colas y maderas de aglomerado, son muy volátiles y de carácter irritante provocando cefaleas y náuseas.

Los mismos equipos de aire acondicionado debido a sus espacios cerrados como serpentines, bandejas de condensados, cañerías de desagotes, etc., privados de luz a temperatura estable, con humedad y suciedad como nutrientes pueden originar un proceso de putrefacción que los convierte en un caldo de cultivo ideal para el crecimiento y proliferación de microorganismos de tipo animal o vegetal, consistente en bacterias patógenas, hongos, levaduras o virus.

Teniendo en cuenta estos antecedentes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1982 ha establecido que los edificios con un porcentaje de mas del 20% de personas que experimentan efectos agudos sobre la salud y el bienestar debido a los niveles de polución, conforman una enfermedad denominada Síndrome del Edificio Enfermo (SBS).

Se ha determinado que el polvo es el principal agente transportador de sustancias alérgicas, compuesto de una gran variedad de elementos orgánicos e inorgánicos, que incluyen fibras, esporas, granos de polen, mohos, insectos y ácaros, producen síntomas que van desde una pequeña irritación a problemas respiratorios graves, que pueden derivar incluso en patologías crónicas.

Los conductos de aire acondicionado que contienen desde el polvo común hasta roedores, hojas, bacterias, hongos y mohos son un caldo de cultivo para la reproducción de contaminantes biológicos, debido a su temperatura constante, humedad y suciedad como nutrientes.

Un ejemplo es la epidemia de 1977, en el Hotel Bellevue-Strafford, de Filadelfia, durante la celebración de una convención de la Legión Americana, donde se detectó que el germen que la produjo era causante de neumonía y fue bautizado por tal motivo con el nombre de legionella y fue difundido por la red de conductos de aire acondicionado constatándose que se desarrolla en presencia de humedad. Un importante brote, ocurrió en Netherlands en marzo de 1999 involucrado a 242 casos de enfermedad y 28 muertes.

Surge de todo lo indicado, la necesidad imprescendible que en todo edificio que cuente con instalaciones de climatización que implique el tratamiento del aire, que por sus características constructivas, extensión de conductos, actividades que en ellos se desarrollan y cantidad de personas que los ocupan, de establecer normas que obliguen a limpiar periódicamente los conductos, además de los equipos de aire acondicionado.

A tal efecto, son los municipios los que deben disponer su regulación y control mediante normas de implementación y en ese sentido, cabe consignar que la Municipalidad de Buenos Aires ya ha elaborado un anteproyecto de Ordenanza, habiendo ya recabado la opinión de diversos Organismos al respecto.

En cuando a las tareas a realizar podrían considerarse las Especificaciones Generales de Limpieza para Sistemas Comerciales de Aire acondicionado establecidas por las NORMAS NADCA (National Air Duct Cleaners Association).
Existen en la actualidad modernos sistemas de limpieza de conductos, aprovechando las entradas naturales como rejas o difusores o bien mediante tapas de inspección que deben ser colocadas al efecto para tal función, introduciendo un vehículo dotado de una cámara fotográfica digital automática, comandado por radio control que realiza una inspección previa a la limpieza.

Robot Limpia Conductos
El robot cuenta con una sonda propulsora, que aspira el polvo que va a una bolsa colectora llevando en uno de sus extremos cepillos giratorios de polipropileno duros y blandos de acuerdo al grado de adherencia de la suciedad como se detalla en la figura. En el momento en que se lleva a cabo la inspección, se realiza una toma de muestras para ser sometida a análisis de laboratorios.

Luego los conductos de aire acondicionado son higienizados mediante procedimientos de aspiración, sopleteo con inyección de aire comprimido y cepillado eliminándose la suciedad existente.

Una vez realizada la higiene, se introduce nuevamente el robot que verifica el conducto tomando imágenes de su aspecto interior desde varios puntos, proporcionando una cinta de vídeo de la inspección y estado de limpieza.